La policía ha confirmado que uno de los fallecidos es el autor de los disparos.
Al menos tres personas murieron este lunes en un tiroteo registrado en un supermercado de la cadena Walmart en Duncan, en el condado de Stephens, Oklahoma.
La policía ha confirmado que los fallecidos son dos hombres y una mujer, y que entre ellos se encuentra el autor de los disparos, que falleció tras darse a la fuga.
Según el jefe de policía Danny Ford, citado por la televisión local TNN-ABC, las tres personas fueron asesinadas fuera del supermercado.
El supuesto atacante ha fallecido tras darse a la fuga
Testigos del incidente aseguraron a la prensa haber oído varios disparos en el interior de la superficie comercial. La policía de esta ciudad colindante a Oklahoma City, capital del estado, describió al sospechoso del ataque, iniciado 9:53 hora local (15:53 GMT), como un hombre “vestido completamente de negro”, y ha pedido cualquier información relativa a su persona.
Las autoridades han dado orden de cerrar las escuelas de la zona temporalmente, aunque fuentes policiales apuntan que a la media hora han vuelto a abrir.
Por el momento se desconoce la motivación del tiroteo y no se ha informado de las circunstancias en las que el supuesto atacante falleció.
En agosto de este mismo año, otro supermercado de la cadena Walmart fue escenario de un tiroteo. En aquella ocasión, un supremacista blanco abrió fuego en El Paso, Texas, causando la muerte a 22 personas e hiriendo a 24. Apenas unos días antes, otros dos individuos habían sido asesinados en otro supermercado en el estado de Misisipi.
Se trata del cuarto tiroteo en EE.UU. en los últimos cuatro días
El de hoy es el cuarto tiroteo en Estados Unidos en los últimos cuatro días: el viernes pasado, un alumno de una escuela en Los Ángeles mató a dos de sus compañeros y se suicidó de un disparo en la cabeza, lo que le provocó unas heridas que le ocasionaron la muerte días más tarde.
Menos de 24 horas después cinco personas perecieron, incluidos tres niños, y otra resultó herida en un tiroteo este sábado en una vivienda en San Diego, California (EE.UU.). El domingo, al menos cuatro personas perdieron la vida y otras seis resultaron heridas en otro ataque armado en Fresno, en California.
El Congreso de EE.UU. lleva más de dos décadas sin aprobar una ley que limite significativamente la posesión de armas.
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